El portavoz municipal, Adrián Hernández, explica que también se sustituirían por vajilla reutilizable o biodegradable en las actividades públicas organizadas por el consistorio
19 de julio de 2019. El portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Sabadell, Adrián Hernández, ha presentado una propuesta de su formación para “eliminar los plásticos de un solo uso de los edificios municipales y de las actividades públicas” organizadas por el consistorio. La moción de Cs, que se debatirá en el pleno de este mes, plantea que se emplee vajilla reutilizable siempre que sea posible o, en su defecto, biodegradable. El edil ha aclarado que el objetivo es que “Sabadell empiece la adaptación a la futura directiva para la reducción de plásticos de un solo uso en la Unión Europea”, aprobada inicialmente el pasado marzo y pendiente de ser ratificada por el Consejo Europeo.
Adrián Hernández ha señalado “las graves consecuencias para el medio ambiente” que implican el abuso de este tipo de envases y “el escaso reciclaje que se realiza”. Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el 79% de la basura plástica generada acaba en vertederos o en el medio ambiente, solo el 9% se recicla mientras que el 12% se incinera. Dicho estudio denuncia que “en 2050 habrá más plásticos que peces en los océanos”, ha advertido el concejal. Por esta razón, la iniciativa de Cs pide que el Ayuntamiento garantice, por ejemplo, que las máquinas de vending situadas en dependencias municipales incorporen la opción de servir sin vaso o, de lo contrario, sean compostables.
Ciudadanos ha apostado porque el consistorio intente limitar al mínimo el uso de agua envasada en plástico en sus eventos y porque “garantice que las entidades de nuestra ciudad puedan tener a su disposición material y utensilios de plástico duro reutilizables para minimizar la posibilidad de generar residuos en actividades y fiestas populares”.
Finalmente, el portavoz de la formación naranja local ha recordado que, “en 2021 quedará prohibido el uso de numerosos utensilios hoy de uso cotidiano”, como los cubiertos, platos y cañitas de plástico o ciertos envases para comida y bebida que ahora sirven cientos de establecimientos de comida rápida. Según Hernández, “es responsabilidad de las administraciones públicas adaptarse y avanzarse a esta directiva europea, sobre todo ante la preocupante situación ambiental”.